viernes, 29 de septiembre de 2023

FESTEJANDO A SAN MIGUEL ARCÁNGEL.



FESTEJANDO A SAN MIGUEL ARCÁNGEL.

 

Anoche, al acostarme escuché algunos cohetes aislados. De momento no recordé, pero en las primeras horas de la mañana. ¡San Miguel! Sí, hoy se celebra a San Miguel Arcángel.

 

El único templo donde se celebra a San Miguel en Acámbaro, es en una capilla tradicionalista, muy humilde, con techo de lámina de zinc. Hoy, después de hacer mi ejercicio matutino decidí acercarme a ella. Estaban en misa, así que me tocó presenciar parte de la ceremonia.

 

Pero antes de hablar de la ceremonia, trataré de describir la capillita, la cual se encuentra ubicada en la calle 5 de Febrero, casi esquina con Nicolás Bravo. En su exterior luce también de lo más sencilla, al grado que difícilmente se le reconocería como una iglesia. Sin embargo, el día de hoy, 29 de septiembre de 2023, me sorprendió darme observar que ya cuenta con una pequeña campana, así como un arquito de metal con una cruz en la parte superior que ya permite intuir que se está frente a una iglesia.

 

Yendo de camino hacia la capilla, de pronto caí en la cuenta de que me faltaba el velo. En esta versión del catolicismo tradicionalista, las mujeres deben cubrir su cabeza para ingresar al templo. Pero me atreví a entrar porque traía mi gorrito para el sol. Y bueno, pensé, si me dicen que me salga, pues me salgo. Pero pasé bastante desapercibida, lo cual me dio cierta tranquilidad para presenciar por un buen rato el desarrollo de la ceremonia.

 

El templecito estaba lleno de gente. Las mujeres todas de un mismo lado, con sus faldas largas y su cabeza cubierta, los hombres del lado contrario. Todos con mucha devoción y con ciertos libritos donde se presentaba la liturgia del día, por supuesto, todo en latín.

 

La ceremonia estaba presidida por un obispo de voz potente y aterradora, dos monaguillos y en la parte musical dos solistas buenísimos que cantaron la mayor parte de los cánticos en gregoriano antiguo. ¡Un verdadero tesoro! Me hicieron recordar mi estancia de veinticinco años en el coro de Fray Abel Perea, que en gloria esté. Incluso pude sumarme al Kirie, porque formaba parte de nuestro repertorio.

 

En este rito tradicionalista, el celebrante se coloca de espaldas al pueblo y frente al altar. Hoy me enteré, por boca del obispo que celebraba, que nadie puede tocar el altar más que el sacerdote. Y lo más que puede hacer un diácono es besarlo. Porque el altar representa el cuerpo mismo de Cristo.

 

La ceremonia transcurría entre cánticos en el más puro latín, y cuando se anunció el evangelio, pensé que se leería en español, pero no fue así. Se cantó y desde luego, también en latín y de espaldas al pueblo.

 

Bueno, pensé yo. Entonces los fieles con qué se van a quedar de toda la ceremonia. Ah, pues la homilía si se expresó en español, y con esa voz casi aterradora del obispo celebrante. Por cierto, que lo más destacable del sermón fue la reprimenda que les hizo a todos los feligreses porque no tenían un buen sonido, porque había que organizar la ceremonia del próximo año, pero, sobre todo, porque no se confesaban y estaban poniendo en peligro la salvación de su alma.

 

Hubo algunas cosas que me gustaron, por ejemplo, la atmósfera de respeto y devoción que observaba en los fieles, los coros en latín, el templo estaba recién pintadito de azul cielo, el altar lucía encantador, enarcado por unas cortinas azul y oro, así como, seis candelabros y siete arreglos florales, pero, sobre todo, una bellísima imagen de San Miguel Arcángel al centro.

 

Lo que menos me gustó fue la actitud amenazante del obispo, no sólo por la intensidad de su voz, sino por el sentido apocalíptico que imprimía a sus palabras. 

 

Y bueno, pues con ésta me despido, compartiendo con ustedes mi celebración a la fiesta de San Miguel Arcángel, patrono y protector de la iglesia universal.

 

MARÍA MARTHA MORENO MARTÍNEZ

Acámbaro, Gto.

29 de septiembre de 2023

AL MAESTRO CON CARIÑO

AL MAESTRO CON CARIÑO.

 

 

Primero de secundaria.

El mundo desde la ventana.

Corría el año 1968, estaba recién egresada del colegio Josefa Ortíz de Domínguez de un grupo de 15 compañeros, y así arribé al mundo ¡gigante! de la “gloriosa E.S.F.A”. Toda una hazaña. ¡Sí señor!

 

Uniforme rosa, primera fila, tercera columna, primer piso, grupo I C. 

La timidez absoluta, el miedo a todo, la soledad, el mundo desde la ventana para contemplar, desde ahí, al chico de ojos color miel. Salidas sólo al baño, durante el receso, por algún alimento. Y nuevamente al salón. 

 

Mochila azul, perecederos zapatos Canadá, trenza, por un lado. Imprescindible.

 

Taller de taquimecanografía, máquina de escribir Olivetti, Lettera 22, regalo de mi padre en la que escribía cartas a las distintas embajadas siguiendo este modelo:

 

Embajada de Italia en México.

 

 

Soy Martha Moreno, una niña de 13 años a la que le gustaría mucho conocer su país, pero como estoy tan pequeña, no puedo hacerlo.

 

Por eso me dirijo a Uds. para solicitarles que me hagan favor de enviarme folletos, postales, o cualquier material que me ayude a conocer su país.

 

Muchas gracias.

 

Escribí muchas, muchas cartas como ésa… 

-       ¿tú crees que van a contestar?  tus cartas ni siquiera dirección tienen. Además, cómo una embajada se iba a “tomar la molestia” de contestarle a una niña de 13 años, teniendo cosas tan importantes que tratar. 

 

Pero yo, ignoré todo lo que me decían y para mi sorpresa y la de los demás, mi recámara se empezó a inundar con todo tipo de materiales venidos del mundo entero:  postales, libros, revistas, periódicos, etc. Fue así como me hice de una colección de postales de la Capilla Sixtina. ¡todo un tesoro!, pensaba yo. También de una foto de la Mona Lisa, de Leonardo da Vinci, y una postal del Vaticano que adornaron mi carpeta de notas escolares y que me hacían sentir de lo más orgullosa.

 

También presumía con mis amiguitos las fotos de los astronautas que irían a la Luna y que me habían enviado de la embajada de los Estados Unidos.

 

Pero, desde luego, una de las imágenes más claras que tengo en mi memoria, es la de mis maestros, vestidos con tanta propiedad. Los varones con su traje impecable. 

 

Recuerdo con mucho cariño al maestro Herminio. Con el que obtuve mi único 10 en matemáticas en toda mi vida. Nunca lo olvidaré.

 

Al maestro Cuco, tan exigente en su clase de geografía, pero gracias a maestros como él, mis compañeros y yo pudimos forjar nuestro carácter. No era fácil lograr buenas calificaciones con él.

 

Segundo de secundaria.

El despertar. 

 

Segundo piso, uniforme azul, y flor azul en el pelo para sujetar mi inseparable trenza, por un lado

 

Empiezo a tener más confianza en mí, la presencia de Javier Sáenz y Polo Domínguez ahora son importantes, porque compito con ellos por los primeros lugares del grupo.

 

También empiezan las riñas por la permanencia. Con cierta frecuencia, algunos compañeros se ponían de acuerdo para “salarse” las clases y esperaban que todo el grupo los apoyara. Yo nunca lo hice. 

– pero es que si te quedas nos van a poner falta. 

– ¡pues váyanse!, yo me quedo. 

Así me gané la enemistad de muchos, pero puedo decir que permanecí firme en mis convicciones. La niña tímida de primero, se empezaba a hacer notar. Empecé a perder el miedo y la convivencia con los demás me resultaba muy agradable. 

 

El sonido de la banda de guerra hacía vibrar todo mi cuerpo. Me encantaba desfilar. Lo único que no me gustaba era la posición que ocupaba en el contingente, siempre hasta el final por ser tan pequeña. 

 

El deporte nunca fue mi pasión. Creo que siempre tuve clara conciencia de mis limitaciones y me sentía muy vulnerable ante el balón, por lo que me limité a pasar la materia de educación física haciendo los ejercicios obligatorios de gimnasia.

 

Los maestros de segundo que impactaron mi vida hasta hoy en día:

 

Raúl Trejo que me introdujo a fondo en la magia de la literatura, ya que antes de él, sólo podía leer los trozos de periódicos en los que me envolvían los chiles o los piloncillos que nos mandaban a comprar a la tienda de la esquina.

Pero un día, el maestro Trejo nos dio una lista “enorme” de libros, y dijo: “para la próxima semana deben traer uno de éstos”.  Pero ¿cuál?, tin marín de do pingué: Los Miserables de Victor Hugo.

-       Papá, necesito este libro para la próxima semana. Cuando lo vi, casi me desmayo. Era tan enorme que pensé no lo terminaría jamás. Pero, lo terminé más pronto de lo que imaginaba y lloré con la historia de Jean Baljam, y de Fantina. Viví el amor entre Cosette y Mario, me refugié en las Tullerías de París, en fín. A partir de ahí, la lectura ha sido parte imprescindible de mi vida. ¡Gracias maestro Trejo!

 

El maestro Lara. De él recuerdo haberlo admirado siempre por su forma impecable de vestir, además me enorgullece conservar, aún ahora su amistad. Me fascina cuando nos encontramos deambulando por las calles de Acámbaro y nos damos un gran abrazo. Gracias maestro Lara.

 

También del maestro Lara recuerdo mi primer “viaje de prácticas”, nada menos que al museo de Antropología. ¡Maravilloso! Mi padre, que siempre, nos animaba a salir estuvo totalmente de acuerdo, hasta que vio el autobús del que ya no me quise bajar hasta que regresamos. 

 

La maestra Martha Camacho. Inmersión al mundo de la poesía:

 

Guatimoc valeroso y desgraciado.

Si profanar las puertas del sepulcro te es dado acaso

¡ven! ¡oye mi acento!

¡quiero escuchar tu voz!

Contemplar quiero tu guerrera frente.

 

Siento la tierra girar bajo mis pies.

Nieblas extrañas vi vista ofuscan.

Y hasta el cielo suben.

De repente, ¡una mano de cadáver me aferra el brazo y me levanta!

¡Cielos, cielos! ¿qué estoy mirando?

 

Guatimoc valeroso y desgraciado.

¿Así trata un valiente a otro valiente? Dije.

Y agarrar quise del monarca el manto

Pero se deslizaba.

Y aire sólo con los dedos toqué.

 

Luis Gallardo.

Su influencia marcó mi vida para siempre. Puedo decir que, en mi trabajo como profesora, sus enseñanzas fueron mi inspiración.

Amaba su gran sabiduría, su altísimo grado de organización y control de su clase, su enorme capacidad para “ir al grano”, nunca divagó. Su clase para mí era “perfecta”. De él aprendí el valor de la expresión escrita, de la buena redacción, de la ortografía, aprendí a escribir a máquina, etc. Su influencia, ha sido para toda la vida. ¡Gracias maestro Gallardo!

 

Fin de año, entrega de calificaciones. Listado de materias: música: 5. ¡no puede ser!, yo era la mejor alumna del grupo, me encantaba la música, cantaba muy bien, pero un error de la profesora me llevó a enfrentar esta situación. Esperaba que mi familia me apoyara, pero no fue así. Recurrí a todas las instancias que tenía a mi alcance y nada fue posible. Pero, hasta hoy recuerdo lo ocurrido como un incidente que me fortaleció. Aprendí a enfrentar el mundo yo sola. ¡Qué gran experiencia!

 

Tercero de secundaria.

 

Químico Juan Araiza Godínez.

 

Uniforme guinda, asesor: químico Juan Araiza Godínez. ¡gran maestro! Su influencia fue tan valiosa para mí que debo decir que, gracias a él, fui química, porque a partir de sus clases supe que lo mío eran las ciencias naturales. 

Un día, organizó una excursión a la Refinería de Salamanca, para los mejores alumnos. Y yo no podía faltar. Pero la condición era que debíamos vestir con pantalón. Mi padre, que no podía concebir que las niñas llevaran pantalones, tuvo que comprarme el primer pantalón de mi vida para asistir a ese viaje. ¡Inolvidable!

 

Del químico Juan Araiza aprendí mucho, quizá no tanto contenidos específicos, pero sí, como una valiosísima influencia para mi vida. Él con su experiencia, su presencia, su impecable imagen, su disciplina, etc. Nos ayudó a ser mejores seres humanos. Recuerdo cómo se esforzaba porque recibiéramos el salón en el mejor estado posible; perfectamente pintado, limpio, butacas como nuevas, etc. Y así había que entregarlo. Una gran enseñanza para mí aún ahora. 

 

De tercero de secundaria, mi recuerdo más significativo es, sin lugar a dudas, mi experiencia con el químico Juan Araiza Godínez, que en gloria esté y a quien recuerdo con gran cariño y gratitud. ¡Hasta siempre, mi gran Maestro!

 

De esta forma, estoy culminando este sencillo homenaje a mis maestros de secundaria al que he denominado: AL MAESTRO CON CARIÑO.

 

MARIA MARTHA MORENO MARTÍNEZ

Acámbaro, Gto.

28 de septiembre de 2023.

lunes, 11 de septiembre de 2023

UN TESORO EN SAN MIGUEL

 

UN TESORO EN SAN MIGUEL.

 

Tomarte una selfi con las emblemáticas torres a tu espalda sí, caminar por sus callejuelas empinadas sí, sentarte en el jardín principal a ver a la gente pasar sí, tomarte un trago en un bar de lujo sí, hospedarte en un hotel 5 * sí, disfrutar de un excelente concierto de jazz sí, visitar un viñedo para degustar un buen vino sí. ¡Todo eso es posible en San Miguel!

 

Pero No, ¡San Miguel tiene mucho más que dar!   tesoros escondidos para el viajero tradicional que forman parte ineludible de su patrimonio histórico, social, cultural y religioso. Hoy te hablaré de uno de esos tesoros escondidos de San Miguel de Allende.

 

Pero antes, permíteme compartirte algunos datos, tales como: la fecha de su fundación, en 1542 por fray Juan de San Miguel. Y su nombre original: “San Miguel el Grande”.

 

Por su ubicación geográfica San Miguel el Grande fue el paso obligado en el centro del país para todo tipo de mercancías, principalmente la plata, venida de las minas de Guanajuato en su camino hacia la capital.

 

Además, San Miguel de Allende y el Santuario de Atotonilco, están reconocidos como patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde el año 2008.

 

Y, por si todo lo anterior fuese poco, por tercer año consecutivo y quinto en su historia, San Miguel obtuvo el galardón en los «Readers’ Choice Awards 2022» al encabezar el Top 10 de las Mejores Ciudades Pequeñas, por encima de destinos como Oxford en Reino Unido, Brujas en Bélgica o San Sebastián o Málaga en España.

 

Hoy visité San Miguel de Allende en una visita relámpago, llegué a eso de las 8 de la noche en medio de una pertinaz lluvia y con hambre. Pensé que si me acostaba sin comer no podría conciliar el sueño, así que, después de registrarme en el “Quinta Loreto” me dispuse a buscar algo de comida, aun cuando la lluvia no cejaba de caer. Lo que encontré fue un bolillo y una gelatina. ¡Mn! …. no estuvo mal.

 

Dormí deliciosamente y desperté a eso de las 6 am, tomé una ducha helada, que me despejó muy bien.

 

Luego, me encaminé, orientando mis pasos hacia el repicar de las campanas que anunciaban la primera llamada de la misa de 8.

 

Fue así como descubrí el tesoro del que hablaré a continuación, me refiero al “Templo de Nuestra Señora de la Salud”. Desde que puse mi pie en su interior percibí una atmósfera muy agradable, que de pronto no pude descubrir, ahora lo sé porque investigando en la red encontré el comentario de que la mayoría de las iglesias latinoamericanas, a imagen de las españolas, muestran una “fijación centrada en el martirio”. Efectivamente, nada más ajeno en el templo de Nuestra Señora de la Salud. Este templo muestra una imagen bastante alegre del concepto del cristianismo, que se puede percibir en diversos detalles, lo cual ya es un tesoro en sí mismo.

 

El templo es muy pequeño, no creo que mida más de 15 mts. de fondo. Tiene un altar muy clásico, enmarcado por 6 columnas corintias. Presenta un enchapado en oro bastante mesurado, lo cual le proporciona un aspecto sobrio y elegante.

 

Contrariamente a lo tradicional, como son los cuatro apóstoles, o las cuatro apariciones de Guadalupe. Las pechinas están bellamente decoradas con las imágenes de las 4 virtudes cardinales: justicia, templanza, perseverancia y fortaleza. Algo que jamás había visto en tantos y tantos templos que he visitado en mi vida.

 

La imagen de Nuestra Señora de la Salud que domina el altar central, es completamente diferente al resto de las imágenes que he visto hasta ahora: luce un hermoso vestido blanco extendido, como para mostrarse mejor, decorado de una pedrería muy fina, más parecido a un ropón de bautismo que a un vestido de una imagen religiosa. Su rostro es bellísimo, su peinado es sencillo y porta un velo de tul totalmente transparente y muy fino, que deja al descubierto su hermoso rostro y su cabeza.

 

Está flanqueada por unas bellas imágenes de sus padres, me refiero a Santa Ana y San Joaquín. Y cuando digo que son bellas estas imágenes, es porque realmente lo son. Estos santos sí que aparecen en multitud de templos, pero las imágenes que he visto hasta ahora son francamente deprimentes. Todo lo contrario, a las de este templo.

 

También llamó mi atención el hecho de que, no obstante, el aspecto más bien “modesto” del templo, tuviera en su coro un gran órgano tubular, muy bien cuidado. Eso sólo lo he visto en iglesias más espectaculares y muy antiguas.

 

Pero lo que más me sorprendió, sin lugar a dudas, fueron sus óleos, realmente dignos del museo Del Prado de Madrid. En el lado izquierdo un gran Cristo, al estilo de Rubens. 

 

Sin embargo, el mayor tesoro que descubrí fue el hermosísimo retablo en el lateral derecho de la Cruz Latina que domina el templo, el cual está dedicado al “Buen Pastor”. Dicho retablo no está en excelentes condiciones, la madera está un tanto dañada, la imagen central, desde mi punto de vista, rompe un tanto con la armonía del conjunto. Sin embargo, considero que lo más valioso e increíble del retablo son los bellísimos doce oleos, de autor anónimo, que presenta, todos ellos dedicados al “Buen Pastor”. En ellos se observa a Jesús en diferentes contextos, rodeado siempre de sus ovejas. Recuerdo uno en particular; Jesús coronado de espinas, rostro en tierra y a su lado una ovejita lo mira lastimosamente.

 

Y para fortalecer mi comentario acerca de este templo diré que el interior de la sacristía está dominado por un óleo de gran formato y colores vibrantes que representa la Virgen de las Tres Aves, bellísimo también. 

 

Al salir del templo me encaminé hacia el atrio del mismo y fue así como, literalmente, pisé la placa de bronce en la que, en el año 2008, la UNESCO declara a San Miguel el Grande y al Santuario de Atotonilco como “Patrimonios de la Humanidad” citando su arquitectura religiosa y la arquitectura civil del poblado como una muestra de la evolución de las diferentes tendencias y estilos, desde el Barroco hasta el Neogótico de finales del siglo XIX.

Me gustaría despedir este escrito haciendo patente una invitación para que, en tu próxima visita a San Miguel de Allende, te animes a admirar tan bello tesoro, que estoy segura les sorprenderá.

 

Referencias:

 

https://www.cultura.gob.mx/turismocultural/destino_mes/guanajuato/sn-miguel.html

 

https://www.facebook.com/SMASacro/photos/a.105489197975409/234668745057453/?type=3

 

https://www.vatican.va/archive/catechism_sp/p3s1c1a7_sp.html#:~:text=Pueden%20agruparse%20en%20torno%20a,los%20medios%20justos%20para%20realizarlo.

 

https://www.entornoturistico.com/san-miguel-de-allende-es-la-mejor-ciudad-pequena-del-mundo-2022/

 

 

MARÍA MARTHA MORENO MARTÍNEZ

Acámbaro, Gto. 

10 de septiembre de 2023

lunes, 4 de septiembre de 2023

VISION CALEIDOSCÓPICA

 

VISIÓN CALEIDOSCÓPICA.

 

Paco y Bicho eran dos ratones que, se conocían desde que eran niños. Sus familias eran vecinas en el barrio.

 

Un día, despertaron muy aterrados porque ¡la tierra se zarandeaba!, no lograban mantener el equilibrio, ¡se caían! 

 

- ¡un terremoto!

 

- ¡corran¡, ¡vamos afuera! Gritaban todos en el barrio. Pero, desgraciadamente ambos perdieron a sus familias y fueron a refugiarse a las ruinas de una casa que, había sido abandonada a raíz del terremoto. Ahí se alimentaban de las migajas que habían dejado esparcidas por el suelo los vecinos de la casa y saciaban su sed en la gotera que un tubo roto, fue entonces cuando decidieron comenzar una nueva vida juntos, para apoyarse entre sí. Sin embargo, las cosas no fueron tan fáciles como suponían.

Con cierta frecuencia se le escuchaba decir a Paco:

 

-       Mira Bicho, ¡que orejas tan grades tienes! ¡Qué feo estás Bicho!

-       Pero….

-       No, no, no me digas nada, ¿ya viste que trompa tan chata tienes?

-       Pe, Pero….

-       No, no, no me digas nada, ¡mira nada más que ojos tan saltones!, si te digo que ¡estás feo Bicho!

 

Un día, llovió a torrenciales toda la noche y al día siguiente observaron que había grandes charcos en el campo donde no había antes más que tierra sucia.

 

Fue entonces cuando decidieron salir   a dar un paseo.

 

¡No puede ser!, pensó Paco para sus adentros cuando vio su imagen en el espejo del primer charco que había visto en su vida.

 

-       ¿Éste soy yo?

-       Pues claro Paco, quien más iba a ser.

-       ¡no puede ser! ¡Bicho, Bicho! ¿qué es lo que estoy mirando?

-       Ah, pues es tu imagen en el espejo del charco.

-       Pe, pero, ¿es que también yo tengo grandes orejas, trompa chata y ojos saltones? Dijo Paco ¡No puede ser!, debe tratarse de una visión caleidoscópica, o algo así. Éste no puedo ser yo.

-       Yo siempre te quise decir, espetó Bicho, que éramos muy parecidos, pero tú no me dejabas ni hablar, ¿lo recuerdas Paco?

-       ¡Pues claro que lo recuerdo Bicho! Si no perdía ocasión para hacerte notar tus defectos y mira nada más, ahora descubro que somos ¡iguales! ¡qué terrible visión!, ¡esto no puede ser!

-       ¡Ah, ya!  ¡tranquilízate Paco!, acepta que ambos somos ratones y que, por lo tanto, somos iguales, y hemos de vivir la vida de la mejor manera. ¿no te parece?

-       Pues creo que tienes razón Bicho, ¿me disculpas?

-       Bueno, si ya no has de…..

-       No, no Bicho, lo prometo. Ya no volveré a molestarte.

-       Y desde ese día, Paco y Bicho llegaron a ser buenos amigos.

 

MARIA MARTHA MORENO MARTINEZ.

Acámbaro, Gto.

4 de septiembre de 2023

 

 

 

 

ALGUNOS DETALLES DE LA PELICULA F1

                                    ALGUNOS DETALLES DE LA PELÍCULA F1.     Se podría decir que soy cinéfila desde hace varios años, pues di...